Sé cual fue el momento exacto en que nació dentro de mí. Recuerdo con gran nitidez como cada día iba notando que crecía, y recuerdo que llegué a pensar que tal vez al final saldría algo bueno de todo esto. Ahora sin embargo me da pavor imaginar qué forma tendrá lo que llevo dentro. Por si acaso cada día soporto sin derramar una sola lágrima que me estruje el estómago, pisotee mis tripas y trepe hasta mi garganta, a ver si así se aburre y para, pero insiste incansable.
Pensé que una vez que te fueras definitivamente dejaría de crecer, pero aún hoy en día se revuelve y engorda cada vez que suena tu nombre. Se me enciende el cuerpo, el vello se me eriza y la ansiedad toma forma humana. Creo que ya no puedo contenerlo y me aterra la idea de que se acabe apoderando de mí por completo sin poder hacer nada por evitarlo.
Pero he estado pensando. Tal vez si antes de llegar a ese extremo le doy un poco de lo que quiere se calme, tal vez así podamos llegar a una especie de tregua. Y se me ha ocurrido que lo mejor es hacerlo por la noche, una de esas sin luna, una en la que no pueda ver lo que mi cuerpo y mis manos hacen. Será esta noche. Me dejaré llevar, que haga conmigo lo que se le antoje, que me use y me tire si quiere, cualquier cosa con tal de poder volver a ser yo mañana por la mañana.
Ilustración - "Can't sleep" Vladstudio
10 comentarios:
Ya me contarás como te ha ido, ¿te dió una tregua o te sigue dando guerra?
Un saludo y espero que puedas visitarme.
es verdad, a veces da rabia tener que calmar a ese pequeño monstruo interior que llevamos dentro, sea cual sea la forma en que se manifieste. interesantes "desvaríos"... salute
Da gusto ver caras nuevas por el blog. Gracias a los dos por la visita y el comentario, se agradecen y calman un poco esa rabia que últimamente me corroe a ratos, jeje.
Yo entro sin llamar, perdona...
Difícil es llevar y sobrellevar algo que nos come por dentro, espero que la terapia vaya funcionando.
Saludos
Bienvenida Lúcida, y pasa hasta la cocina si quieres, aquí cada uno puede hacer lo que se le antoje.
Te diré que sí, que la terapia funcionó, y visitando tu blog vi claro el porqué:
"La mejor manera de librarse de la tentacion es caer en ella" Te suena ¿no?
Un saludo.
Bueno Suel, si en los momentos de rabia coges un teclado o un bolígrafo en lugar de un cuchillo bonitero, el asunto no es tan grave. La ira, para escribir y para matar marcianitos en un videojuego, puede incluso ser provechosa. Es cuestión de canalizarla.
Va, en serio, bonito texto. Me encanta el final.
Un saludo (ya sabes que, como dice la canción, soy como el Paraná, besa la playa y se va)
Por cierto, ¿tú también eres fans de Quique González? ;) Creo que la ciudad del viento era Mahón... Qué pasada de canción.
La rabia es dificil de controlar y nos lleva a cometer errores, pero, debo reconocer que mi sistema de controlarme siempre no suele dar buenos resultados. Sea como sea, creo que la soltaste de una bella manera en el post. Saludos.
La rabia que te entra cuando te quedas sin coca y se te ha pasado el subidon.
Me
Hola de nuevo Terminus. Gracias por los cumplidos. Mi ciudad del viento es zaragoza y la verdad es que no, no he oido la canción a la que te refieres, pero rápidamente me engancho al iTunes y la busco.
Hola a tí también Mar. Supongo que lo ideal es controlarse, pero hay que ver que gusto da explotar de vez en cuando.
Y a tí que quieres que te diga Johnny, con ese tipo de comentarios me cierran el blog. Me temo que ni tú ni yo hemos desfasado tanto como para saber cómo es esa rabia que mencionas, pero le va al pelo a tu personaje en la red.
A veces tenemos dentro un pequeño animal dispuesto a saltar, a destrozarlo todo, a tirarlo todo por la borda.
Unos lo duermen con alcohol, otros con canciones y otros con palabras. Elige tu arma de combate y lucha, por que si sale perderas para siempre algo de ti.
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