16 enero 2008

Pensamiento a revisar nº1

Hoy iba, como todos los días, abrigado hasta las orejas, con el mp3 en marcha y mirando fijamente el suelo del autobús mientras pensaba que la vida es una mierda la mayor parte del tiempo, que no es justo tener que levantarme a estas horas y con este frío para ir a trabajar. También como casi todos los días, el conductor ha dado un frenazo que casi me hace salir por el cristal del parabrisas. He levantado la vista con el ceño fruncido esperando ver más caras de indignación que respaldaran el gruñido que me asomaba por la garganta, pero me he encontrado algo muy diferente.

Sentados en el primer asiento estaban un padre y un niño, ambos de raza gitana y con un aspecto que dejaba claro que no eran de esas personas con una vida fácil. Él con la cara avejentada a pesar de que sus ojos no tenían más de 25 años. El crío, casi un bebé llevaba un abrigo con más agujeros que tela y el pelo sucio y enmarañado. Los dos miraban con una sonrisa de oreja a oreja algo que el niño tenía entre las manos y que resultó ser una monda de naranja. La estrujaba con sus manitas hasta hacerla diminuta y luego abría las manos y reía a carcajadas viendo como la cascara volvía a hincharse como por arte de magia.

Por un momento he sentido una envidia feroz de la felicidad inocente de ese niño. Luego me he sentido terriblemente mal por ello y simplemente he apartado la mirada para poder seguir lamentandome a gusto por mis propias miserias.

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Todos los dias suceden situaciones "maravillosamente" felices pero desgraciadamente tan breves que no nos percatamos. Pero haberlas, hailas.

Así que, !a estar mas atentos!.

Bye

Johnny 99 (que no recuerda su contraseña)

. dijo...

Buen blog, saludos.

English Little Pills dijo...

Hola Johnny, como siempre tienes más razón que un santo. Lo maravilloso del día de hoy, por ejemplo, es que ya queda menos para el fin de semana!!!!!

Pablo, gracias por la visita y el piropo. Ahora mismo me paso por tu blog a devolverte la visita.

Anónimo dijo...

He pasado a devolverte la visita.
Volveré, te lo prometo.
Saludos

Javier Puche dijo...

Tras leer tu perfil, no puedo evitar preguntarte cuál es tu libro favorito. No temas, nadie va a considerarte un freak. O mejor dicho, ¿quién no lleva dentro un freak?
Gracias por tu visita a Puerta falsa.