30 noviembre 2009

Al otro lado

Siento que cada cosa que has hecho me frena, como si me pusieras la zancadilla y no me dejaras salirme del camino marcado. Por tu culpa no puedo hacer lo que realmente quiero, ni tan siquiera puedo ser quien realmente quiero ser. Pero he decidido que se acabó, que me voy sin ti para empezar de nuevo desde cero donde yo decida y como a mí me de la gana.

Soltó todo esto mirándole fijamente a los ojos y, sin dar tiempo a que le respondiera, se dio la vuelta y se marchó dando un portazo. Y su reflejo se quedó allí, clavado al otro lado del espejo, con cara de asombro y la palabra en la boca.

16 noviembre 2009

¿Hasta que la muerte nos separe?

Patricia murió en su noche de bodas con el vestido de novia aún puesto. Pero Patricia no se vengó del hombre que la había engatusado para después asesinarla sin compasión alguna porque, a pesar de todo, era hombre al que amaba con todas sus fuerzas.

Por eso siguió cuidando de él cada día sin descanso como lo hubiera hecho en vida. Le despertaba cada mañana con un beso en la mejilla, le repasaba el traje antes de que saliera a trabajar, le acompañaba durante la cena para que no se sintiera solo y le arropaba en la cama.

Tanto quería a aquel pobre desgraciado que ni siquiera se rindió cuando llegaron los malos tiempos. Sin dudarlo un segundo le ayudó a empaquetar todas sus cosas, le dio la mano bien fuerte y se mudó con él al manicomio el día que vinieron a buscarle.



11 noviembre 2009

Cosquillas, al fin!!

Por fin ha pasado.

Iba caminando por mitad de la Gran Vía cuando de pronto noté un pequeño cosquilleo en la nuca, justo donde me empieza a crecer el pelo. No sé cómo funcionan el resto de los seres humanos, pero en mi caso eso sólo quiere decir una cosa: ideas en ebullición.

Si todo va bien en un par de días más las cosquillas ya me habrán llegado a la yema de los dedos y entonces, ¡cuidado del bolígrafo o el teclado que pille por banda! Estoy deseando ver qué sale porque, como ya he dicho, no sé como funcionan el resto de los seres humanos, pero en mi caso yo no sé qué se está cociendo en mi cabeza hasta que no lo veo escrito en un papel.

Y eso me encanta.